MATAMOROS, TAMAULIPAS.- El frente frío número 47 que arribó a Matamoros el miércoles por la noche inhibió la llegada de turistas a la playa Bagdad donde se esperaban 10 mil personas según las reservaciones que se tenían registradas.
Temperaturas menores a los 15 grados centígrados, lluvias, vientos con rachas de hasta 80 kilómetros por hora y oleaje de hasta cuatro metros de altura fueron las condiciones metereológicas que prevalecieron en el balneario natural de la frontera tamaulipeca.
Se calcula que en las primeras horas de la mañana ingresaron ocho vehículos por hora, cifra que se incrementó en horas de la tarde pero sin alcanzar las visitas que se esperaban.
Familias de Reynosa, Nuevo León y de Matamoros acudieron para disfrutar del paseo turístico y aunque había la advertencia de la marea alta no resistieron la tentación de disfrutar de las frías aguas del Golfo.
Muchos de los visitantes solo se mantuvieron en los estacionamientos del área turística, otros más acudieron a los restaurantes y algunos más se conformaron con tomarse fotografías desde la barda de contención.
A lo largo de la costa personal de la Marina, Protección Civil y de la Policía Estatal realizaban rondines para evitar que los visitantes corrieran riesgos, haciéndoles saber las condiciones de la marea.
Según el administrador de la Playa, Manlio Villar Martínez la infraestructura del lugar no sufrió daños por los vientos o el oleaje, aunque se retiró el mobiliario desde las primeras horas de la madrugada.
Aunque el número de visitantes fue mínimo los operativos de seguridad y de salud se mantuvieron tanto en el área de ingreso como en el interior de playa Bagdad.
Los pronósticos climatológicos señalan que para este viernes las condiciones mejorarán por lo que se podrían esperar los 10 mil visitantes autorizados para este balneario natural.
