En uno de sus últimos mensajes CDV afirma: “hoy vivimos mejor”

Victoria

VICTORIA, Tam.- El gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, quien encabezó esta mañana la ceremonia en la que se montó una guardia de honor en el 212 aniversario de la independencia de México, emitió su último mensaje como gobernador de Tamaulipas, se despidió de los tamaulipecos e invitó a que las diferencias, “nunca sean obstáculo para seguir construyendo juntos el México y el Tamaulipas que queremos heredarle a nuestros hijos y a las próximas generaciones”.

Y agregó, “podemos y se vale pensar distinto, pero eso no debe distraernos, para que cada quien ponga de su parte, para acceder a más seguridad, tranquilidad y desarrollo en todos los puntos del estado, tenemos un compromiso con la historia, una responsabilidad con las nuevas generaciones y todos estamos llamados a cumplirla”.

En su discurso, dijo sentirse orgulloso de los tamaulipecos, pues en pluralidad y el pensar distinto, “hoy vivimos mejor que al inicio de mi gobierno, con nuestras legítimas diferencias, en tan solo seis años, ciudadano y autoridades, sacamos a Tamaulipas de los estados más violentos del país”.

Señaló que se aceleró el paso de la economía local, generando más oportunidades laborales, además de proteger la salud, “mejoramos nuestra salud, recuperamos nuestros espacios públicos y cuidamos del medio ambiente”.

El mandatario, quien estuvo acompañado de autoridades civiles y militares, al hacer una remembranza del inicio de la independencia de 1810 en el país, destacó los aprendizajes que deja, entre ellas, la búsqueda permanente de una mejor nación para todas las familias mexicanas.

“Entre los aprendizajes más importantes está, que no todos debemos pensar igual para trabajar unidos y conquistar objetivos comunes, por contradictorio que parezca, es en la diversidad ideológica, política y cultural, donde se enriquece la conversación pública, así como se amplían las alternativas para avanzar hacia mejores niveles desde seguridad, ingreso, educación, salud y alimentación para todos.

Señaló que no todos los mexicanos en 1810 pensaban igual o coincidían en las estrategias para ganar la guerra, sin embargo, “emprendieron una batalla frontal que alineó esfuerzos, supero adversidades y mantuvo vivos los deseos de cambio, consiguiendo el nacimiento de una nación”.

Resaltó que en la sociedad mexicana de hoy, como en la sociedad de Tamaulipas, “también convive una amplia pluralidad política e ideológica, una diversidad deseosa de acceder a una mejor calidad de vida”.

Por Perla Reséndez