La abogada de la acusación particular en la causa contra el futbolista Dani Alves por presuntamente agredir sexualmente a una chica en la discoteca Sutton de Barcelona valoró que dejar al brasileño en libertad provisional sería “un atentado a la integridad psicológica” de la denunciante.
La representante de la joven, Ester García, dijo en declaraciones a los periodistas tras la vista en la Audiencia de Barcelona que abordó el recurso con el que la defensa de Alves trata de sacarlo de prisión provisional, donde está desde el 20 de enero.
“Mientras él estuviera en libertad, ella se ve obligada a estar encerrada. Pensad que su sintomatología ya no es de una mujer que ha sufrido una agresión sexual, sino que aquí se suma una presión mediática, es decir, es un plus en esta sintomatología traumática“, añadió García.
La abogada contó que en la vista se opuso a que Alves salga de prisión provisional argumentando “no solo que hay indicios suficientes de criminalidad, sino que hay un riesgo elevado de fuga“, tanto por la pena que podría afrontar como por su capacidad económica.
García señaló que “la instrucción se está practicando de una manera muy diligente, muy rápida” y que el brasileño lleva un mes en prisión preventiva y aún no se han practicado todas las diligencias de investigación, por lo que es necesario que esté disponible para el juzgado.
LA DEFENSA DE DANI ALVES CUESTIONA LOS INDICIOS CONTRA ÉL
La Fiscalía y la acusación particular pidieron mantener en prisión provisional al futbolista Dani Alves, apelando al riesgo de que se fugue y a los indicios que la investigación recabó contra él, mientras que su defensa puso en duda las pruebas que lo señalan, explicaron fuentes jurídicas.
El abogado de Dani Alves, Cristóbal Martell, pidió dejarlo en libertad con otras medidas de seguridad para garantizar que no se fugara, como por ejemplo entregar su pasaporte y llevar una pulsera de geolocalización.
La sección 3 de la Audiencia de Barcelona resolverá en un auto el recurso que abordaron este jueves: no tiene un plazo concreto para contestar, pero al tratarse de una causa con preso previsiblemente lo hará pronto.
En la vista se discutieron sobre si estas medidas serían suficientes para evitar una eventual fuga, pero las partes también entraron a argumentar sobre los indicios que reunió la investigación hasta ahora, como las huellas y restos de ADN del jugador.
La instrucción constató que en la vagina de la denunciante había restos de ADN de Alves –lo que es contradictorio con la última versión de lo ocurrido que dio el jugador–, y su defensa se agarró a la ausencia de lesiones vaginales para sostener que no fue una agresión sexual sino sexo consentido.
Con información de Europa Press.