Reynosa, Tamaulipas.- Medio centenar de vecinos de la colonia Lázaro Cárdenas decidieron organizarse como sociedad para exigir que el ayuntamiento que encabeza el alcalde Carlos Peña Ortiz, cumpla con sus promesas de campaña, y solucione el problema de aguas negras, baches, falta de alumbrado público, y cumpla con las obras públicas, pactadas para esta comunidad.
Y decididos a superar 50 años de ser el vertedero de aguas negras de la ciudad y en una declarada manifestación de democracia participativa, los colonos eligieron a mano alzada el primer comité electo desde las bases populares.
Así, el Arquitecto Luis Osvaldo Casas fue electo por aclamación mayoritaria como presidente del nuevo Comité de Participación Ciudadana de ese sector de la ciudad, aledaño a la laguna La Escondida, quien el pasado miércoles por la tarde rindió protesta en una singular ceremonia comunitaria, acompañado de la secretaria y la tesorera señoras Rocío Alvarado y Olivia Méndez, así como nueve vocales que impulsarán la solución de la problemática de esa colonia.
El derrame de aguas residuales es grave: la confluencia de la avenida “Américo Villarreal Guerra” y calle “Amado Nervo”, es el punto principal donde las alcantarillas del drenaje sanitario manan a borbotones aguas negras y desechos fecales que dañan el ambiente.
El problema es tan añejo que los lodazales y los encharcamientos cenagosos producidos por la fuga de aguas residuales crearon desde hace décadas una atmósfera irrespirable en la colonia, de una extensión de 51 hectáreas y donde radican unas 4,210 personas en 1,370 casas, -819 personas por kilómetro cuadrado-, con una edad promedio de 4 años, pues de las casi 5,000 residentes del sector 200 son menores de 14 años y 200 tienen entre 15 y 29 años, según MARKET DATA MEXICO.
Zoila Durán Ruiz, quien durante seis años encabeza una Coordinación en la colonia, se queja: “hemos ido a COMAPA. Nos dicen que van a venir, pero no acuden: ¿por qué tenemos que cargar nosotros con las descargas de drenaje de la ciudad?”.
Don Lázaro López, residente de 65 años, recuerda con nostalgia y enojo: “hace 50 años papá nos decía: ‘hijo, me voy a morir, y este problema no se va a solucionar’… y mire usted, papá murió en 1975, ya me voy a morir yo y el problema de las aguas negras ahí está, igual que hace cincuenta años”.
La señora Teresa de Jesús Peña, quien radica en “Francisco Villa” con “Américo Villarreal”, pide ser tomada en cuenta, pues el problema de las descargas le ha trastornado la vida familiar, al igual que las señoras Nancy Teniente, María Teresa Bueno y María Reyes Soto, quienes piden la palabra para solicitar apoyo del Comité.
O como don Simpliciano Ortega Juárez, que alzó la voz para ser postulado como vocal y sumarse a las gestiones que se hagan para resolver los problemas de la colonia: “pues según vemos, en teoría toda la colonia está pavimentada, pero mire usted cómo estamos”, dice señalando la calle a ras de tierra.
A veces se caldean los ánimos y los vecinos no dudan en responsabilizar a COMAPA del grave deterioro ambiental, pues a pesar de que se ha reportado innumerables veces la colapsada red de drenaje, no la atienden: “este es un problema de los cárcamos: ¿cuántos están funcionando?”, pregunta.
Y en efecto: el reventadero de la red provoca que a lo largo de las calles brote a borbotones el agua negra y desechos fecales, a toda hora, semejando fétidos géiseres.
ORGANIZARSE COMO SOCIEDAD MODERNA
En sus intervenciones, el Arquitecto Luis Osvaldo Casas, un joven profesionista que despierta la confianza y el apoyo de su comunidad, convoca a organizarse como sociedad para resolver la problemática de la colonia, “pues solo unidos, y organizados, podremos hallar soluciones en beneficio de las generaciones que vienen”.
Afable, desde la plataforma de un remolque y micrófono en mano, el arquitecto Casas emprende un nuevo liderazgo social y convoca a organizarse para iniciar cuanto antes las acciones que se requieran para resolver el problema de las descargas de aguas residuales y otros problemas de la colonia.
Al concluir la reunión vespertina y en una peculiar ceremonia comunitaria al pardear la tarde, el Comité vecinal con el arquitecto Casas como presidente y las señoras Rocío Alvarado y Olivia Méndez como secretaria y tesorera, rindieron protesta, acompañadas de sus nueve vocales.
CON INFORMACIÓN DE AGENCIA ANTAM