Las industrias aprendieron a ahorrar agua

Zona Sur

ALTAMIRA, TAMAULIPAS.- Por la escasez que predominó en la zona conurbada hace unos meses, industrias de Altamira optaron por aplicar medidas de ahorro en el consumo de agua.

El sector industrial consume un 47 por ciento menos de agua en comparación al año pasado, afirmó el presidente de la Mesa Ciudadana del Agua, Luis Apperti Llovet.

Reveló que la empresa coreana Posco, trae niveles del 85 por ciento de disminución en el consumo de agua.

Detalló que los procesos de las empresas también han cambiado y eso ha influido para que el consumo del agua sea menor.

“Posco ya trae niveles de 85 por ciento de disminución de consumo, pero el promedio, toda la industria está consumiendo 47 por ciento menos que hace un año y esto es por los ahorros internos y a los procesos que han ido cambiando”.

A decir del expresidente de la Asociación de Industriales del Sur de Tamaulipas (Aistac), el precio del agua a las industrias siempre es muy superior al de la ciudadanía, sin embargo que el tema no es lo que cuesta, sino qué se hace con el agua.

Afirmó que el cambio climático es algo que no se puede negar, que la amenaza ahí está y lo que se debe hacer es cuidar el recurso que se tiene.

Después de la crisis hídrica que padeció Tampico, Madero y Altamira, agregó que se debe concretar el reuso del agua y el tratamiento de las aguas negras para que se aprovechen de manera integral,

Aunado al aprovechamiento de las aguas residuales, Luis Apperti Llovet refirió que se debe trabajar en el mejor proyecto que aumente la reserva del agua.

“Después ver si crecemos el reservorio trabajando de la mano con la Secretaría de Recursos Hidráulicos para ver cuál es el mejor proyecto que nos permita mejorar el sistema lagunario”.

Adelantó que en las próximas semanas se llevará a cabo un foro del agua que permita crear un plan para garantizar el suministro, no tan solo a la iniciativa privada, sino también a la población.

La semana pasada, se inició la construcción de una planta tratadora de aguas residuales en el sector de la Pedrera por parte de una empresa, cuya inversión será de 450 millones de pesos.

Uno de los propósitos de la planta, es que el agua tratada sea vendida a las industrias para sus procesos y dejen de usar la del sistema lagunario.

La crisis de agua generó a las industrias de Altamira pérdidas económicas de 34 millones de dólares al día.

De las 34 empresas que integran la Aistac, 22 plantas pararon actividades por la falta de agua durante un mes aproximadamente.

Algunas compañías se abastecían de agua por medio de pipas, pero hay otras que dependían del sistema lagunario Champayán para poder operar.

La cadena productiva no solamente resultó afectada en México, sino en todo el mundo, ya que la producción de Altamira se exporta a varios países.

Durante la crisis de agua, la compañía Chemours localizada en la colonia de Miramar, contempló importar una desalinizadora portátil, sin embargo al registrarse las lluvias, consideró que no era necesaria.

“La planta desalinizadora llegó, se quedó en la frontera por la dificultad de los permisos de importación y de operación por parte de Semarnat, pero pensábamos que no llovería tan rápido y una vez que hubo suficiente agua, no se justificaba tanto la inversión”, declaró Luis Apperti Llovet.

Por. Óscar Figueroa

Expreso La Razón